¿POR QUÉ TRABAJAR POR EL AGUA Y SANEAMIENTO DE NUESTRAS COMUNIDADES?

Estamos inspirados por lograr que todas las personas en Guatemala sin importar su sexo, edad, condición socio económica e identidad cultural, puedan gozar del derecho humano al agua limpia y a un saneamiento seguro y eficiente, tal y como muchos de nosotros y nuestras familias lo disfrutamos.  Esta inspiración nos ha llevado a tomar acción y participar en un trabajo que solamente de forma colectiva puede tener los alcances que se necesitan.  Para trabajar en ello debemos entender el problema y sus dimensiones.

Todos los guatemaltecos sin excepción tienen derecho a la vida, al desarrollo pleno de sus facultades, la salud, la educación y a un ambiente sano. El agua potable y el saneamiento eficiente y sostenible constituyen un derecho humano esencial (DHAS) para el disfrute de una vida digna y de un bienestar pleno, de toda la población. El cumplimiento de este derecho debe ser uno de los fines del Estado y de la Sociedad en su conjunto.

En el caso particular de Guatemala, el cumplimiento de este derecho está lejos de ser una realidad. De acuerdo con el CENSO 2018, cuatro millones de personas no tenían acceso al agua potable y siete millones sin acceso a saneamiento mejorado. El Banco Mundial, según una investigación realizada indica que para “responder a los desafíos que se proponen en los ODS6 el sector necesita más y mejores inversiones en APS, en alrededor de $528 millones anualmente.

Esta realidad que presenta Guatemala, respecto a la disponibilidad de agua para consumo humano, en cantidad adecuada, calidad continuidad y costo asequible; así como a los servicios e instalaciones de saneamiento mejorados, tiene un efecto directo e impacto en los casos recurrentes de las infecciones gastrointestinales, de las vías respiratorias, desnutrición, deserción escolar, afecta la salud especialmente de la niñez y de la madre.

El vínculo entre la calidad de los servicios de Agua, Saneamiento e Higiene ASH es muy fuerte como señala la Cruzada Nacional por la Nutrición: “La línea de acción de agua segura, saneamiento e higiene se incluye en la misma, debido a la relación directa entre la deficiencia de estos servicios, las enfermedades diarreicas y la malnutrición; su mejoramiento, así como las prácticas higiénicas, conseguirán, por tanto, no sólo cumplir con el Derecho Humano al Agua y al Saneamiento, si no también contribuir con la reducción de los problemas de malnutrición en el país.” (Cruzada Nacional por la Nutrición 2020)

Los esfuerzos que a la fecha se realizan, pareciera que no han identificado con propiedad la magnitud del problema y, por lo tanto, no se asigna un valor estratégico al agua potable y el saneamiento, desde una visión social, económica y ambiental. La falta de oportunidades para mejorar el ingreso, la carencia de servicios básicos y de oportunidades, no permite a los habitantes de las comunidades mejorar sus condiciones de vida, salud y educación.

Para conocer más sobre nuestras acciones clave, iniciativas y proyectos da clic en este botón.

La vida nos inspira a hacer esto, el agua es vida, el saneamiento es salud.